Conocí a Isabel hace ya un par de años, no recuerdo exactamente el momento, pero desde aquella vez me impresionó su know-how y determinación para que Iris Experience se convirtiera en un referente del marketing digital. Junto a su cofundador Antxon Pous, ella es la CEO de la empresa que desarrolla y comercializa aplicaciones digitales para departamentos de marketing o agencias interactivas en modalidad de alquiler (Software as a Service), y sé por experiencia que trabajan muy bien. Como complemento a su actividad principal, imparte clases en diversas universidades, como el IDEC-UPF o el IQS, además de colaborar con Onda Cero en un programa de radio, formar parte del Consejo Asesor de programa de la Xarxa Activa de Barcelona Activa y presidir el Comité de Marketing Interactivo de la Asociación de Profesionales del Marketing.
Su primer éxito emprendedor surge como en las mejores historias del Valle del Silicio, vendiendo un proyecto al Ayuntamiento de Barcelona desde el garaje, lo que llevó a conseguir que Widgadget fuera finalista en el premio Best Business Plan de la Jove Cambra en 2007 y el Premio a la Innovación bdigital 2008, entre otros. A partir de allí, su carrera sólo ha crecido: globalizarla fue de hecho la forma de mostrar todo el potencial que su equipo tiene, han emprendido proyectos impensables en la empresa española hoy. Es un común denominador para muchas empresas tecnológicas que conozco, lamentablemente. Pero también indica ambición y capacidad de liderazgo internacional de las que salen al extranjero.
Pero como buena emprendedora de éxito, sabe reconocer su primer fracaso, el empezar un proyecto ambicioso para finalizarlo en poco tiempo sin el capital necesario, quizás fue una ilusión pensar que llegaría durante el desarrollo. Sin validar el modelo de negocio y sin conseguir los recursos justos no vas más rápido, correr más no siempre te lleva por el mejor camino, el más corto. Quizás por eso, su mejor momento del día es por la mañana, en la ducha, donde repasa mentalmente la jornada y se estructura.
Inspirada por Eudald Domènech, no sólo por su trayectoria, sino porque fue uno de los primeros emprendedores que le habló de los errores cometidos y no de sus proyectos, si pudiera volver atrás hubiera creado la empresa antes, emprender es un trabajo 24×7 (24 horas, siete días a la semana) que consume mucha energía y tiempo. Seguro que su recién nacido hijo le ayuda a cumplir su sueño de crear una fundación para fomentar el uso en las empresas de las tecnologias relacionadas con el marketing digital, porque Iris Experience es ya una referencia consolidada.
Mientras, se pierde en Cadaqués, en especial en primavera u otoño, con la tranquilidad que emana su sencillez, sus casas blancas y su gente. Y desde allí, rodeada de familia y amigos, disfruta del apacible momento de felicidad que está viviendo.
¡Fuerza y suerte!